Los más aventureros acuden al Parque del Segre para disfrutar de la emocionante práctica del ràfting, piragüismo, y como novedad este año, el rocódromo. Todo lo que se necesita es mucha disposición y ganas de disfrutar de estas actividades que forman parte del turismo de aventura que el emplazamiento promueve.
El rafting consiste en descender las bravas aguas de los ríos y para ello existe un singular lugar especializado para el desarrollo de su práctica: El Parque Olímpico del Segre, ubicado en La Seu d'Urgell, el cual está adaptado junto a una derivación del río Segre que permite la enseñanza y práctica de esta actividad junto con el piragüismo, deportes acuáticos que son el resultado de la celebración de las competiciones de piragüismo en eslalon, de los XXV Juegos Olímpicos de 1992.
Así mismo, las perfectas condiciones de las instalaciones para el ejercicio de estos deportes acuáticos permiten definir dos tipos de vertientes: la lúdica, que comprende las actividades de rafting, hidrospeed y kayak en aguas tranquilas; y la deportiva, que incluye el piragüismo de eslalon de aguas bravas, una disciplina olímpica de exigencia y destreza. Carles Juanmartí, ganador dos medallas de bronce en el Campeonato Mundial de Piragüismo en Eslalon de 2009, afirma que el enclave ha instruido a profesionales a nivel competitivo tales como Núria Vilarrubla, especializada en esta modalidad en la categoría C1, que cuenta con cuatro medallas en el Campeonato Europeo de Piragüismo en Eslalon y es recientemente campeona del mundo sub23.
Actualmente el emplazamiento cuenta con instructores especializados que promueven y fomentan el aprendizaje de acuáticas actividades con una gran seguridad, de manera que permite descender rápidos impresionantes, entrar en contacto directo con el agua de forma divertida pero sobre todo recorrer un espacio natural de agradables vistas: “el entorno y la amistad entre los monitores junto con el paisaje que el Parque ofrece son elementos idílicos para la práctica de esta actividad de aventura en estas instalaciones”, declara Albert Guiu, monitor de la escuela del Parque Olímpico del Segre.
Así mismo, las instalaciones cuentan este año con una gran novedad que enriquece la extensión de las posibilidades deportivas del parque: el rocódromo, un espacio al que acuden tanto escuelas infantiles como profesionales de la escalada. "No queremos cerrarnos únicamente en actividades acuáticas", asegura Albert, y es que el parque también quiere promocionar otro tipo de deportes, como la escalada, en relación a las montañas que envuelven el río que da nombre a las instalaciones: "queremos innovar cada año y es por eso que se decidió crear el rocódromo respondiendo a la necesidad de una variedad deportiva”, confirma el instructor.
Durante los meses de julio y agosto, el emplazamiento se convierte en uno de los lugares más afluentes de la Seu d’Urgell, donde familias acuden a disfrutar de las actividades en las que participan tanto los más pequeños como los adultos.
Así mismo, las perfectas condiciones de las instalaciones para el ejercicio de estos deportes acuáticos permiten definir dos tipos de vertientes: la lúdica, que comprende las actividades de rafting, hidrospeed y kayak en aguas tranquilas; y la deportiva, que incluye el piragüismo de eslalon de aguas bravas, una disciplina olímpica de exigencia y destreza. Carles Juanmartí, ganador dos medallas de bronce en el Campeonato Mundial de Piragüismo en Eslalon de 2009, afirma que el enclave ha instruido a profesionales a nivel competitivo tales como Núria Vilarrubla, especializada en esta modalidad en la categoría C1, que cuenta con cuatro medallas en el Campeonato Europeo de Piragüismo en Eslalon y es recientemente campeona del mundo sub23.
Actualmente el emplazamiento cuenta con instructores especializados que promueven y fomentan el aprendizaje de acuáticas actividades con una gran seguridad, de manera que permite descender rápidos impresionantes, entrar en contacto directo con el agua de forma divertida pero sobre todo recorrer un espacio natural de agradables vistas: “el entorno y la amistad entre los monitores junto con el paisaje que el Parque ofrece son elementos idílicos para la práctica de esta actividad de aventura en estas instalaciones”, declara Albert Guiu, monitor de la escuela del Parque Olímpico del Segre.
Así mismo, las instalaciones cuentan este año con una gran novedad que enriquece la extensión de las posibilidades deportivas del parque: el rocódromo, un espacio al que acuden tanto escuelas infantiles como profesionales de la escalada. "No queremos cerrarnos únicamente en actividades acuáticas", asegura Albert, y es que el parque también quiere promocionar otro tipo de deportes, como la escalada, en relación a las montañas que envuelven el río que da nombre a las instalaciones: "queremos innovar cada año y es por eso que se decidió crear el rocódromo respondiendo a la necesidad de una variedad deportiva”, confirma el instructor.
Durante los meses de julio y agosto, el emplazamiento se convierte en uno de los lugares más afluentes de la Seu d’Urgell, donde familias acuden a disfrutar de las actividades en las que participan tanto los más pequeños como los adultos.